Durante los últimos años he tenido que reaprender a hacer ciertas cosas, y la tecnología se ha convertido en una gran herramienta para relacionarme con el mundo.
Cuando no puedes ver hay cantidad de información que te pierdes, cosas tan simples como no poder ver el horario de la estación, el número del autobús o el muñeco verde del semáforo pueden convertirse un gran problema.
A fuerza de práctica y muchos pequeños trucos, las personas con discapacidad visual somos capaces de realizar casi cualquier tarea de forma independiente, y la tecnología es, con seguridad, nuestra gran aliada.